3.23.2023

JUEVES DE LA LUMBRE: BENITO JUAREZ MASON

 

Buenos días, en el último post en honor a Don Benito Juárez de la tradicional semana del benemérito (a menos que descubra que también fue médico y tenga material para un post de viernes saludable) vamos a placar de la masonería. Así que presten el lápiz toso y papel para empezar con los apuntes.

La masonería o francmasonería se define a sí misma como una institución de carácter filosófico, filantrópico e iniciático. Nació en Europa a finales del siglo XVII, aparentemente entre los círculos intelectuales y políticos de la Ilustración. Sin embargo, mitológicamente la masonería rastrea su origen en los gremios de constructores de las catedrales medievales. De forma más aventurada, algunos consideran que la masonería nació durante la construcción del Templo de Salomón o al mito adámico.


Los grupos masónicos a su vez están conformados por logias, cofradías o hermandades formadas por un número mínimo de maestros. Por su parte, la vida de las logias gira en torno a símbolos arquitectónicos que son análogos a distintos niveles de comprensión filosófica y moral.

A su vez, las pequeñas cofradías suelen suscribirse a otras más grandes, a las que llaman Gran Logia. En el interior, las cofradías suelen agruparse en torno a un rito, pese que existen grandes logias que pueden agrupar más de uno.

Originalmente las logias masónicas estuvieron compuestas por sociedades exclusivamente varoniles, consecuencia de distintas creencias metafísicas. Sin embargo, actualmente existen grupos exclusivamente femeninos o mixtos, pese que no siempre son reconocidos por las logias conservadoras.

¿Qué hacen los masones?

Al ser una sociedad iniciática, la masonería se compone de diversos rituales tradicionales cuyo objetivo es producir un cambio de consciencia en los aspirantes a pertenecer a una logia, los cuales son denominados como profanos.

Después del escrutinio del aspirante, el profano pasará por una serie de rituales con los ojos vendados, en los cuales se compromete con la institución y juramenta ante un el Venerable Maestro (líder de la logia), luego de lo cual se transforma en un aprendiz de masón. Posteriormente podrá aspirar a los dos grados básicos subsecuentes, compañero y maestro, para ello elaborará algunos trabajos escritos con carácter filosófico.

Un poco más de los masones en México

La aparición de la masonería mexicana tiene su origen en el siglo XVIII, con la llegada de los primeros inmigrantes de origen francés al virreinato. Para entonces, la masonería vivía su capítulo de incidencia directa en el estallido de la ilustración y la Revolución Francesa. Fue durante dicho movimiento que la frase “Libertad, igualdad, fraternidad” se gestó, convirtiéndose en el lema de la República Francesa y del Gran Oriente de Francia (la más antigua de las obediencias masónicas).

Desde sus orígenes en México hasta la actualidad, el rito predominante en la masonería mexicana ha sido el Rito Escocés Antiguo y Aceptado (REAA). Para 1823 la masonería mexicana sufrió su primera fractura. Fue con la llegada del Rito de York con sesgo político estadounidense que la masonería comienza a dividirse en dos corrientes.

Mientras que los escoceses eran políticamente conservadores y pro europeos, las logias yorkinas apoyaban el Destino Manifiesto y el liberalismo estadounidense. Como consecuencia, algunos masones mexicanos comenzaron a gestar una tercera vía nacionalista, movimiento que en 1826 se fundó como Rito Nacional Mexicano, cuyo mayor representante histórico es el presidente Benito Juárez.

El Rito Nacional Mexicano, donde fue iniciado Benito Juárez

De acuerdo con el sitio web del Rito Nacional Mexicano, éste se define como una institución masónica con el “objeto primordial de cumplir con el sagrado deber de conservar puros los misterios de la orden y trasmitirlos de la misma manera a las futuras generaciones”. Fue fundado con el objetivo de unificar a los masones mexicanos y Benito Juárez fue miembro de una de sus logias de 1858 hasta 1872. A su vez, este rito buscaba recuperar la Francmasonería Primitiva Universal con origen en la Revolución Francesa.

De acuerdo con los registros de la cofradía, Juárez se inició el 15 de enero de 1847 en la logia del Rito Nacional Mexicano “Independencia” No. 2. La sede de reunión de Independencia se encontraba en la sala dedicada la Cámara de Senadores de Palacio Nacional en la Ciudad de México. Hasta la fecha se conserva una placa en la entrada del salón para conmemorar la iniciación de Juárez.



Juárez explica qué entendía por masonería

En documento atribuido a Benito Juárez como “trazado”, título con el que se le conocen a los trabajos dirigidos a las logias, el expresidente define a la masonería de forma tradicional, según la liturgia del primer grado o Aprendiz. Al respecto menciona:

“Es un hermoso sistema moral, o lo que es lo mismo, una asociación de hombre honrados, libres y de buenas costumbres, que buscan el perfeccionamiento de la humanidad.”

Posteriormente, Juárez ahonda en que se trata de una organización moralista, pero de carácter progresista, según los postulados de la modernidad. También afirma el carácter filantrópico de la organización, así como una buena voluntad que la mueve en sus acciones. En cuanto a lo filosófico, pareciera que Juárez consideraba la masonería como una especie de religión perenne, por lo cual describe a la masonería como incluyente.

“No es una religión, pero sí la cuna de todas, ya que acepta a toda persona sin distinción de raza ni credos”, afirma Juárez.

Con respecto a la palabra “masonería”, Juárez se apega al origen etimológico tradicional, según el cual proviene de la palabra inglesa que quiere decir “albañilería”. Sin embargo, aclara que no se debe entender de forma literal, sino simbólica, pues se trata del trabajo de edificación moral a través de las virtudes.

Finalmente, el oaxaqueño explica que decidió hacerse masón por amor al lema filantrópico de la institución: “Libertad, igualdad y fraternidad”. Menciona que el lema le inspira a luchar por los pobre y los que “tienen sed de justicia”, a practicar la tolerancia sin distinciones y a luchar contra “la hipocresía y el fanatismo”.

 

Sacado de mexico desconocido punto com punto emeequis




3.22.2023

MIERCOLES DE ROLA: BENITO JUAREZ

 Buenos días jóvenes, siguiendo con la semana del benemérito, les traemos una pequeña narración y una rolita que seguro la van a traer hasta de tono de celular.

La historia oficial le atribuye el carácter de primogénito del benemérito a Benito Luis Juárez Maza, nacido el 29 de octubre de 1852. Esto es falso ya que dicho lugar le corresponde a Tereso Juárez Ortiz, quien vio la luz en la ciudad de Oaxaca alrededor de 1837, cuando su padre contaba con 30 años.

Como todo hijo natural, y más en el siglo XIX, construir su biografía es particularmente difícil, lo que ha hecho que los pocos historiadores que han acometido esa tarea incurran en errores y omisiones, como lo demuestra una simple búsqueda virtual.

Una equivocación que se repite, además de confundir su fecha de nacimiento, es atribuirle la maternidad a Juana Rosa Chagoya, una de las concubinas de don Benito. Lo cierto es que Tereso es fruto de una relación con María de la cruz Ortiz, al parecer una tehuana de casi 17 años, que luego formaría una familia alejada de Juárez y Tereso.


Aun con su linaje, la fortuna le fue adversa. Vivió modestamente y a veces con estrechez. Siempre fue rechazado por margarita Maza y sus medios hermanos. En la correspondencia familiar ni siquiera se le menciona. Aunque ostentaba el apellido de su padre, se trataba más bien de una concesión, pues legalmente Juárez nunca lo reconoció.

Pese a los desaires, tereso fue el único de los descendientes de Juárez que se dedicó a la milicia y abrazó  la causa liberal. Se tiene registro que ingresó al ejército en 1862, desde el pesto más humilde, y que lidio contra el ejército francés.

El 27 de diciembre de 1863, luego de la derrota del general miguel Negrete en san Luis potosí, fue hecho prisionero. En los informes castrenses se narran esos trágicos sucesos: “…en la tarde de ese mismo día, tanto el expresado capitán como los demás prisioneros son conducidos al patíbulo, donde en los momentos en que estaba ya formado el cuadro para ejecutarlos, llegó la orden del general tomas Mejía suspendiendo dicha ejecución”. Años después, Juárez le pagaría el favor a Mejía, mandándolo fusilar en el cerro de las campanas.

Tras cuatro meses de cautiverio, Tereso logró fugarse y se incorporó a las fuerzas acampadas en Zacatecas. Gracias a su valor ascendió a capitán de infantería y luego a comandante de batallón, cargo que le fue conferido directamente por el presidente, a quien acompaño hasta paso del norte. Por su defensa de la independencia nacional recibió un diploma que amparaba una condecoración de primera clase.


Regresó a la capital al triunfo de la república en 1867 y contrajo matrimonio con teresa Garcés Rendón. Estos hechos lo acercaron a su padre. Según declararían diversos testigos, el “proveyó a la subsistencia y colocación de don Tereso y lo trató siempre en vida con grande afecto y cariño, teniéndosele en la familia legitima de don Benito como hijo de este”. Esto permitió que Justo Benito Juárez Garcés naciera en palacio nacional el 7 de agosto de 1870.

Tereso nunca perdió su vocación militar. Ya siendo presidente Porfirio Díaz, le escribió: “encontrándome actualmente en el depósito de CC. Jedes y oficiales, después de haber prestado mis servicios a la nación en diversas épocas y últimamente en el ministerio de guerra, a donde ingrese por orden de mi padre Benito Juárez… permaneciendo en dicha oficina durante 11 años consecutivos, deseo nuevamente entrar al servicio activo, adonde usted lo crea más conveniente, a cuyo fin me tolo la libertad de dirigirme a usted con el objeto de suplicarle tenga a bien acoger esta petición”. Díaz cumplió sus deseos y lo reincorporó.

A la muerte de su progenitor, Tereso vislumbró que al fin podría proporcionar a los suyos un mejor porvenir, ya que se consideraba con derecho a una parte de la herencia, que estimaba cuantiosa. Fue tal la notoriedad que adquirió en esos momentos en los círculos políticos, que quienes criticaron a Juárez por aferrarse al poder, murmuraron con sorna: “lerdo de tejada será hoy el presidente de la república, a no ser que don Tereso Juárez, el hijo primogénito de don Benito, se presente a reclamar la silla como un mueble de familia”.

Sacado del universal.





3.21.2023

BENITO JUAREZ

Que roio muchachones, que tal de puente? Aca amanecimos a pinchis 5 grados. Hoy se celebra el natalicio de Benito Juárez, así que vamos a hablar del héroe de este respetado blog de mala muerte: Benito Juárez.

Nació en San Pablo Guelatao, Oaxaca el 21 de marzo de 1806, o como le gusta expresar al bachapal, un 21 de marzo de 1806. Hijo de padres indios zapotecas, se fue a Oaxaca a los trece años, cuando aún no hablaba castellano. Por poco tiempo fue cosechero de grana, pero encontró un protector en Don Antonio Salanueva, encuadernador y terciario de la Orden Franciscana. Con él y con el maestro Domingo González, aprendió a leer. Se matriculó en el Seminario de la Santa Cruz, donde estudió preparatoria; cursó latinidad, filosofía, y concluyó el bachillerato en 1827. Al año siguiente ingresó, sin la aprobación de su protector, al Instituto de Ciencias y Artes, donde se graduó de abogado en 1834, correspondiéndole ser el primer profesionista graduado en dicho Instituto.

 


En 1831 fue regidor del Ayuntamiento de Oaxaca y en 1833, fue diputado local. En 1841 fue juez de lo civil y al ser derrocado de la Presidencia el Gral. Paredes Arrillaga, Juárez resultó electo diputado federal. Al volver a Oaxaca, Juárez ocupó por poco tiempo la gubernatura a la renuncia de José Simeón Artega. Al terminar el periodo en agosto de 1848, se presentó candidato al siguiente periodo y resultó electo. Procuró el equilibrio económico y ejecutó algunas obras públicas: caminos, reconstrucción del Palacio de Gobierno, fundación de escuelas normales; levantamiento de una carta geográfica y la formación del plano de la ciudad de Oaxaca; reorganizó la Guardia Nacional y dejó superávit en el tesoro. Terminó su mandato en 1852.

 Al volver Santa-Anna al poder, muchos liberales son desterrados, entre ellos Juárez, primero a Jalapa y luego a La Habana, tras una breve prisión en San Juan de Ulúa. De La Habana se le deportó a Nueva Orléans, donde desembarcó en octubre de 1853. Después, al caer Santa-Anna y llegar Juan Álvarez y Comonfort a la Presidencia, se le nombró ministro de justicia (octubre - diciembre, 1855). En noviembre de 1855, se expide la ley sobre administración de justicia, llamada Ley Juárez, en la que son abolidos los fueros. Nombrado gobernador de Oaxaca, se hace cargo del gobierno el 10 de enero de 1856. Convocó a elecciones y fue designado nuevamente. Al expedirse la Constitución Federal de 1857, la promulgó.

 El 17 de diciembre se proclamó el Plan de Tacubaya; Juárez no se solidarizó con la nueva política de Comonfort y fue aprehendido. Fue liberado en enero de 1858 y salió de la capital. En julio de 1859 expidió, con el apoyo del grupo radical, las llamadas Leyes de Reforma: independencia del Estado respecto de la Iglesia; ley sobre matrimonio civil, sobre el Registro Civil, la de Panteones y Cementerios, paso de los bienes de la Iglesia a la nación.

 


González Ortega, civil improvisado general, llevó al triunfo a las armas liberales y entró a la ciudad de México a fines de diciembre de 1860. Mientras, Juárez había prorrogado su mandato en el Gobierno. Convocó a elecciones y resultó designado para seguir en el mando. La justa suspensión de pagos que ordenó respecto de la deuda extranjera, provocó la expedición de Inglaterra, Francia y España a Veracruz. Al final, Francia quedó sola y en 1862 se inició la Intervención. El ejército francés fue detenido en Puebla por Zaragoza, el 5 de mayo de 1862, pero en 1863, a pesar de la heroica defensa de González Ortega, la ciudad cayó tras tres meses de asedio. El 31 de mayo Juárez dejó la ciudad de México, encarnando en el éxodo la soberanía de México.

El ejército francés se retiró por la situación europea y se inició la restauración de la República. Juárez fue reelecto Presidente nuevamente y tomó posesión el 25 de diciembre de 1867. Tuvo que sofocar rebeliones en México y en Yucatán, y en 1871 se rebeló Porfirio Díaz. Cuando la rebelión iba declinando, murió Don Benito Juárez, el 18 de julio de 1872, en el Palacio Nacional. Acuñó la frase: El respeto al derecho ajeno, es la paz. 


Fuente: banxico punto org punto emeequis, quien a su vez lo sacó del Diccionario Porrúa de Historia, Biografía y Geografía de México.



 

3.20.2023

LUNES CULINARIO: REGAÑADAS OAXAQUEÑAS

 Buenos días mis chavos, bienvenidos a la semana donde festejaremos al mero mero papas fritas de las papas fritas: Benito Juárez, quien al asumir el cargo del Poder Ejecutivo defendió el proceso constitucional de 1857, consolidó trascendentales reformas para el Estado y salvaguardó la soberanía y libertad del pueblo mexicano. A pesar de la atareada administración pública que tuvo que organizar y gestionar, fue una persona que encontraba momentos para sus asuntos privados, como su alimentación.

A partir de un documento intitulado Diario del gasto de la Casa del Señor presidente de la República don Benito Juárez, resguardado en el Archivo General de la Nación, podemos conocer propiamente lo que se llegó a consumir entre mayo y junio de 1860 dentro de la casa presidencial, la cual para aquel momento había sido establecida en Veracruz, estado que se había transformado en bastión de las fuerzas constitucionalistas, las cuales para aquellos meses pudieron disfrutar un lapso de paz después de haber resistido el sanguinario cañoneo de marzo ordenado por Miguel Miramón sobre la ciudad de Veracruz.


La alimentación del presidente y su familia se componía de proteínas, cereales, verduras, frutas y uno que otro postre. Entre la variedad cárnica que se concurría a servir se encontraba res, puerco y pollo, en ocasiones se compraba conejo, pescado y venado. Se preparaban también platillos a base de riñones, sesos, tasajo, longaniza, jamón, quesos y huevos.

Los frijoles, lentejas, papas, camotes, arroz y maíz fueron los tubérculos, legumbres y cereales que acompañaban a los platillos principales, con su respectiva porción de verduras y frutas como nabos, lechuga, berenjena, chícharos, elotes, col, chayote, acelgas, calabazas, nopales y tomates, entre otros productos.

Como postre se degustaban algunos antojitos propiamente de la tierra natal de Benito Juárez como las famosas regañadas oaxaqueñas, el chocolate oaxaqueño y el pan de yema oaxaqueño, también tenía el presidente un gran gusto por el pan chiapaneco denominado capricho. Otros postres que fueron de gran aprecio en las épocas de calor eran los helados y nieves. En ocasiones se prefería mejor un postre más saludable como un plátano dominico, un mago o una buena rebanada de piña.

En esta ocacion vamos a preparar las Regañadas Oaxaqueñas, un pan dulce tradicional de los pueblos zapotecas en el Itsmo de Tehuantepec que originalmente se hacían solo para semana santa. Una verdadera delicia que les encantará preparar en casa.

En localidades como Juchitán y Unión Hidalgo existen familias con más de 4 generaciones elaborando este pan dulce tan tradicional en la zona del Itsmo de Tehuantepec. 

Estos dulces bocados es algo que de pronto olvidamos que también existen en Oaxaca y forman parte de su gastronomía, más allá de los moles, chapulines, el chocolate y platillos típicos que siempre vienen a nuestra mente de este rico estado.

Vamos a necesitar

1kg de harina

350g de manteca

250g de azúcar

1 taza de agua fría

1 cucharada de royal

1 cucharada de sal


 Para preparar las regañadas oaxaqueñas lo primero que haremos será disolver la sal con la taza de agua, mezclamos muy bien asegurándonos de que no quede ni un grano de sal.

Ahora cernimos la harina con el royal sobre una superficie plana y hacemos una fuente o hueco en el centro y ahí añadimos la manteca comenzamos a amasar y poco a poco vamos añadiendo el agua mientras amasamos hasta formar una pasta que debe quedar suave. Esta es la parte que necesitará más de nuestro tiempo para la preparación ya que debe amasarse por un buen rato hasta obtener la consistencia suave que requerimos.

Ya que esta lista la masa o pasta, vamos a formar bolitas como de unos 30g y las colocamos sobre un tazón o charola y las dejamos reposar unos 30 minutos tapadas con un trapo húmedo. 

Prendan el horno a la temperatura más alta, eso ayuda a que el pan se dore.

Pasado este tiempo, cubrimos con mucha harina la superficie plana y tomamos una bolita y la aplastamos hasta formar una tortilla, no se preocupen si no esta delgada, ya que la hicimos con la mano las vamos a extender con el rodillo o con una botella lisa, hasta hacerla delgada, le damos una vuelta como si fuera una quesadilla y le volvemos a pasar el rodillo o la botella. No importa si no les quedan redondas, al contrario, suelen tener más la forma de un triángulo. Vayan extendiendo con suficiente harina para que no se peguen y las van colocando una a una sobre charolas para el horno bien cubierta de manteca de cerdo para que no se peguen las regañadas oaxaqueñas.

Con estas cantidades les pueden salir unas 30 a 40. Así que pueden hacerlas y colocarlas una sobre de otra para irlas metiendo al horno.

Ya sobre las charolas las espolvoreamos de azúcar blanca y en el centro un poco de azúcar morena pintada con polvo rojo o si encuentran azúcar de colores le ponen un puñito para que adorne el centro.

Ahora las metemos al horno entre 15 a 20 minutos, notarán que se van dorando y esponjando, si ven que están antes retiren del horno. Sacamos el horno, dejamos reposar y se pueden guardar en bolsas de plástico para que se conserven.

Y listooooooo, disfrute de sus regañadas y siéntanse como benemérito de las Américas.

Sacado de los sabores de mexico punto com y de doble u doble u doble u punto gob punto emeequis

 


3.18.2023

85 años de expropiación petrolera

 

Expropiación Petrolera en México

 



En 1938, el presidente Lázaro Cárdenas del Río envió un mensaje a la nación por medio de un programa de radio, donde anunciaba la nacionalización de los yacimientos petroleros del país que pertenecían a empresas extranjeras, así que pasaron a ser del Estado.

 Cárdenas del Río realizó la nacionalización de los yacimientos, debido a que había malas condiciones laborales y explotación de los trabajadores en las compañías, por lo que hubo una expropiación legal de tanques de almacenamiento, oleoductos, refinerías e instalaciones de más de 19 empresas que operaban en la República Mexicana.

Con el decreto se logró “el dominio directo de todos los minerales o substancias” del subsuelo, dando paso a la creación de Petróleos Mexicanos (Pemex). Todo esto se llevó a cabo porque en 1935 se unieron los sindicatos independientes dentro del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana, al siguiente año iniciaron las negociaciones para obtener mejores condiciones laborales y prestaciones.

En 1937, el conflicto se llevó ante la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje porque no había solución, así que la junta ordenó el peritaje para comprobar las condiciones de los trabajadores. Mientras, las empresas llevaron el caso a la Suprema Corte de la Justicia de la Nación, que se puso del lado del sindicato, lo que provocó molestia y que las compañías buscaran un colapso económico, lo que derivó en el decreto de Cárdenas.

Cortesía de Cerdoclán 666 kilos de sebo selecto