Bach Long es el puente de vidrio más largo del mundo, atracción turística con la que Vietnam busca recuperarse del Gran Confinamiento. Está suspendido a 150 metros del suelo, tiene 632 metros de largo y soporta 450 personas simultáneamente. El nombre de este puente significa Dragón Blanco en español, y es un destino que fascinará a los amantes de las alturas y paisajes espectaculares.
Los Guiness World Records ya organizan una visita a finales de mes en Bach Long para oficializar el título del puente de vidrio más largo del planeta. Hasta la fecha, ese título pertenece a una estructura de 526 metros ubicada en la provincia de Cantón, en China. Los visitantes tendrán una vista majestuosa de la selva circundante y el complejo hotelero Moc Chau.
La estructura atraviesa un valle y conecta la cima de dos montañas. El vidrio con el que se construyó este puente es de fabricación francesa y las especificaciones señalan que soporta hasta 450 personas al mismo tiempo. Los encargados del proyecto pusieron a prueba la resistencia del material transitando automóviles y camiones por el puente. La constructora parisina Saint-Gobin es autora de la obra.
«Al subirse al puente, los turistas podrán admirar la belleza del entorno natural», señaló Hoang Manh Duy, vocero de la operadora de esta atracción. La secretaría de turismo de Vietnam busca atraer nuevos visitantes y sacar a flote la economía tras dos años de confinamientos. A causa de las prohibiciones de ingreso impuestas, el país sufrió una reducción histórica en la afluencia de turistas.
Desde mediados de marzo, Vietnam autorizó el ingreso de turistas extranjeros sin cuarentena obligatoria. Además, a los turistas de trece países le permiten la estancia hasta por 15 días sin necesidad de visa. Parece que Vietnam apuesta por los puentes y las estructuras altas, como Cau Vang o «Puente de Oro». Además, este es el tercer puente de vidrio que inauguran en su historia.