Que tal chicos, ayer les quedé mal con el post del día, por
eso recorrí el aporte para hoy, así que les traigo una película que no puede
faltar en esta época navideña.
Esta es la historia de Kevin, un niñito rubio que tiene una
familia con mucho dinero, familia que lo deja olvidado en casa mientras ellos
huyen desesperadamente a un destino turístico que no vale la pena mencionar y
se dan cuenta hasta que el avión despega.
De este modo, el buen Kevin se queda Home Alone y hace todo
lo que cualquier niño de esa edad haría si se quedara solo en su casa, como:
comer muchos dulces, tirarse por las escaleras en un trineo y ver películas
viejas.
Total que está todo bien en la vida solitaria de Kevin,
hasta que después esta todo mal porque unos rateros van de casa en casa
buscando objetos que puedan robarse y llegan a la casa de nuestro protagonista.
Pero El niño resulta ser un genio ya que usa pirotecnia, audios de películas y
varios maniquíes que no supe muy bien por qué tenían tantos, para poder
ahuyentar a los ladrones, pero falla.
Los malos intentan entrar de nuevo a la casa y Kevin, en
lugar de ir con la policía o algún vecino o huir de la casa y dejar que le
roben todo, hace lo que ningún niño en su situación haría, enfrentarse a los
ladrones. Con algunas cosas que tiene en su casa y su ingenio, logra hacer un
montón de trampas y hasta se da el lujo de plasmarlas en papel.
Después de haber caído en todas las trampas, cualquier
persona debería haber muerto o mínimo quedar gravemente herido, pero nuestros
bandidos y en un giro inesperado de la trama, atrapan a Kevin y lo cuelgan en
una puerta para darle su merecido, pero es rescatado por un vagabundo que
casual iba pasando por ahí.
Al final y muy tarde, llega la policía y todavía más tarde
aparece la mamá que esperaba ver a su pequeño hijo muerto, pero se encuentra
con una casa limpia, y todo adornado, dejándonos en claro que lo único que
importa es el espíritu navideño.
Cortesía de Xime ^^