El
día de hoy voy a hablarles del deporte más bello del mundo. Desde los tiempos
en que se practicaba con cierto espíritu ritual y aun religioso, hasta ahora,
el deporte es capaz de canalizar lo mejor de nuestra energía vital y creativa,
de poner en movimiento lo que somos pero quizá, especialmente, de mostrar esa unidad
que mente y cuerpo tienen naturalmente en el ser humano.
En
el caso del fútbol, su práctica participa de todo ello. No es casualidad que en
el siglo que tiene de vida se haya convertido en uno de los deportes más
populares del mundo en todos los sentidos, pues además cuenta con un elemento
que lo vuelve todavía más atractivo: el compañerismo. Sea que estemos en una
cancha o que lo miremos en una pantalla, el fútbol es capaz de despertar esa
inclinación gregaria propia del ser humano.
Los
libros que comparto a continuación exploran algunas de esas facetas del
deporte, en todos los casos con creatividad y lucidez y, de ese modo, son
capaces de aportarnos otros ángulos desde los cuales considerarlo.
Cerrado por fútbol, Eduardo Galeano
Eduardo
Galeano fue uno de los grandes intelectuales de América Latina que tuvieron
siempre un aprecio enorme por el fútbol. Por sus propias inclinaciones
personales, Galeano no dudó en llevar al deporte a su campo de reflexión y de
creatividad, tomándolo como motivo central para hablar del ser humano y sus
contradicciones, de la sociedad mercantilista a la que el fútbol también
pertenece, pero también, de cierta épica anónima que es capaz de provocar.
Los once de la tribu, Juan Villoro
El
primer libro que Villoro dedicó al fútbol y, especialmente, al lugar que éste
puede llegar a tener en el imaginario de una persona y también de toda una
sociedad: una posición conflictiva, contradictoria, pasional, que se arraiga en
lo profundo de lo que somos.
Breve historia del ya merito
De
reciente publicación en la editorial Sexto Piso, este volumen colectivo reúne
textos de 14 escritores en torno a los Mundiales que han ocurrido desde Chile
1962 hasta Brasil 2014. No se trata, sin embargo, de un libro histórico, en el
sentido usual de la palabra, sino más bien de un recorrido por la memoria
personal y colectiva que se encuentra ligada a ese acontecimiento inicialmente
deportivo que, por su importancia, se extiende hacia otros ámbitos de nuestra
vida.
Fútbol total. Mi vida contada a Guido Conti, Arrigo Sacchi
Sacchi
se volvió un entrenador legendario porque entendió pronto que el fútbol es sólo
un juego, y que en esto no es muy distinto a la vida en sí. Con ese espíritu
desenfadado, ligero y al mismo tiempo profundamente vital, contó en este libro
la historia de su vida.
Fútbol y poder en la URSS de Stalin, Mario Alessandro Curletto
Iósif
Stalin buscó tener el control de verdaderamente todo: desde las cosechas que se
hacían en la Unión Soviética hasta la teoría de la composición que usaban los
músicos del Conservatorio de Moscú. En este sentido, el fútbol no escapó a sus
intereses. Ahora que el Mundial ocurre en Rusia, vale la pena revisar esta obra
para recordar que un evento deportivo puede servir también a otros fines.
Sobre el deporte, Pier Paolo Pasolini
Pasolini
es mejor conocido por su faceta como director de cine (uno especialmente
iconoclasta, cabe decir), pero su labor intelectual y creativa se extendió
también a la escritura. Además, no era nada ajeno al fútbol, sino al contrario:
en su memoria recordaba este deporte con felicidad y con cariño, y no dudaba en
considerar los días de juventud en que lo jugó como una época especialmente
dichosa. Este volumen reúne los textos que Pasolini dedicó al deporte.
Fiebre en las gradas, Nick Hornby
Un
testimonio encendido sobre qué significa ser aficionado al fútbol en
Inglaterra, país donde se originó este deporte. La pluma ingeniosa de Hornby
explora algunos de los fenómenos más característicos que provoca el fútbol,
pero no por ello menos extraños: la camaradería, el fanatismo, la locura, el
sufrimiento que a veces viene acompañado de haber elegido un equipo y seguirlo
en todas, en las buenas y en las malas.
Fútbol. Una religión en busca de un Dios, Manuel Vázquez Montalbán
Con
perspicacia, este libro explora los paralelismos posibles entre el fútbol y la
religión, a partir de comportamientos que se encuentran en ambos casos, y a la
par, analiza con asombro cómo una actividad sencilla que se practica entre
amigos, al abrigo de una calle poco transitada o en una cancha vecinal, se ha
convertido en un negocio multimillonario sostenido por “feligreses” de todo el
mundo.
Salvajes y sentimentales, Javier Marías
Cuando
en un escritor se combinan la pasión por la literatura y por el fútbol, es
capaz de generar un libro como este. Marías reúne aquí 30 textos en torno a las
muchas caras de dicho deporte (sus personajes clave, momentos memorables, los
efectos subjetivos y sociales a los que da lugar, etc.), en todos los casos,
notablemente escritos.
La suela de mis zapatos, Gonzalo Suárez
Amparado
bajo el pseudónimo de Martín Girard, Gonzalo Suárez (cineasta y periodista,
ambos por accidente) conoció en la década de 1960 una Barcelona muy distinta a
esa imagen de glamur con que hoy la pensamos; una ciudad donde se miraban aún
las consecuencias de la guerra, las crisis económicas y el exilio, misma que
recorrió y contó después con un estilo en donde la verdad tenía el lugar
central, sin matizarla ni intentar esconderla. El libro tiene como punto de
partida una entrevista que Suárez le hizo a Helenio Herrera, jugador y
entrenador legendario que en esa época dirigía el equipo de la ciudad.
BONUS
En Putas
asesinas puede encontrarse “Buba”, un cuento extraordinario de
Roberto Bolaño en torno a un futbolista chileno en Barcelona a quien se le
acaba la racha de éxito y, por ese motivo, se ve arrastrado a una extraña
espiral de sordidez.
Suyo,
Bruno.