Buenos días compañeritos, seguro ustedes han ido a un
consultorio de farmacia y seguro los aliviaron de algo simple como la diarrea,
resfriado común, piojitos, dolor en algún lugar de su cuerpecito o cosas simples
así, pues al parecer a esos consultorios ya mero les dan aire, aquí en el
embrión punto com les informamos oportunamente la situación.
Como consecuencia del (supuesto) desmantelamiento (por
parte de pasadas administraciones) del sistema de salud pública, la
proliferación de consultorios adyacentes a las farmacias de grandes cadenas se
han convertido en un riesgo para la salud cuando se trata de padecimientos
complejos, alertó en la conferencia matutina presidencial el subsecretario de
Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell. Sus médicos en realidad
son agentes de ventas de fármacos, por lo que ante la imposibilidad de
eliminarlos de tajo, hasta que no se restituyan las instituciones publicas, hay
que regularlos.
López-Gatell explicó que los consultorios adyacentes a
farmacias comenzaron su crecimiento hace 12 años, cuando se resintió la
reducción de 60 por ciento en el presupuesto del Issste y 40 por ciento en el
IMSS, al instrumentarse las políticas sugeridas por organismos financieros
internacionales. Estos consultorios ofrecen 25 por ciento de las consultas
médicas en el país y hasta 30 por ciento en la etapa mas intensa del covid.
“Para estas cadenas lo importante es que salgan con una
receta de seis, ocho, 10 medicamentos, la gran mayoría no correctamente
indicados. Durante el covid vimos muy problemático el abuso de antibióticos, de
esteroides, que causaron complicaciones o incluso la muerte de personas que
fueron atendidas en estos consultorios. ¿Cuál es el origen? El desmantelamiento
del sistema público de salud.”
“La idea básica con la que estos consultorios empezaron a hacer fama fue la resolución inmediata, porque simplemente hay que pararse en el consultorio y se le atiende. Pero en realidad es un gran engaño, los consultorios adyacentes a la farmacia no resuelven problemas de salud de mayor importancia”, sentenció el subsecretario.
“Alguien que tiene diabetes, hipertensión, o una
enfermedad pulmonar o cardíaca crónica, como gran cantidad de la población
mexicana, estos consultorios no le van a resolver o incluso podrían poner
el peligro su salud y su vida. Esto está documentado”, agregó.
Este proceso “empezó con Miguel de la Madrid, el
secretario era Guillermo Soberón, que ha sido muy influyente en el mundo
médico, ex rector de la UNAM, y él formuló incluso el proceso de
desmantelamiento de lo público para sustituirlo por lo privado; siguieron los
correspondientes secretarios de Salud de Salinas, de Zedillo, de Fox, de
Calderón, de Peña Nieto”.
Esto no fue un invento mexicano, fue de los sistemas
financieros globales (Banco Mundial, Banco Interamericano de Desarrollo), “se
aplicó en una gran cantidad de países, destacadamente en América Latina,
incluyendo el Chile de Pinochet y Colombia con los gobiernos de derecha”.
Lamentó las condiciones laborales en que se desempeñan
los médicos en esos consultorios con la consigna de vender medicamentos. En lo
inmediato, no es posible eliminarlos, pues la gente acude a ellos porque no
tienen que hacer cita y sólo se logrará desplazarlos hasta que se consolide la
recuperación del sistema de salud pública; por lo pronto, habrá que regularlos.
Dijo que habrá una “fase de transición”, ya que los
consultorios de farmacia hoy “cubren una necesidad” que será cubierta por el
nuevo sistema de salud del presidente Andrés Manuel López Obrador.
“No podemos cancelarlas de tajo. Lo deseable es que no existan”, decretó el funcionario. “Es probable que la fase de transición implique regular de manera más estricta”, amagó.
Y ustedes amiguitos, ¿Cuándo fue la última vez que se atendieron en una clínica del IMSS, ISSTE o de la Secretaria de Salud? ¿Cómo los trataron? ¿Cuánto tiempo invirtieron? Si contestaron que si a alguna de las preguntas anteriores entonces no mmen, ninguna pregunta era de si o no.
Me despido con un besote a la galy y otro al quesitos tan
chulo. Que tengan una bonita semana.