5.30.2017

El amor propio y los hábitos que pueden destruirlo

¿Qué tal, cacariamiflos? ¿Cómo les va? El día de hoy no será un post como los que, últimamente, he mandado. Hace 8 días, con el tema del post, se pasaron de ñonga conmigo; hasta usaron frases en latín para “darle punch” a sus comentarios (ja, ja, ja). Así que, siendo yo un ser de luz, quiero tratar un tema que me sugirió Sabi (y sí, resulta muy paradójico porque yo, francamente, no tengo amor propio).



El amor propio, como lo dice, es todo un conjunto de sentimientos, pensamientos, percepciones hacia nuestro propio ser, o sea, como vemos y apreciamos a nosotros mismos. La importancia del amor propio está en que éste definirá como vemos al mundo y cómo enfrentarnos a él.


Es importante mencionar que el egocentrismo y la autoestima no son lo mismo; el primero, es básicamente, una puñeta mental, pues se suele pensar y creer que, los pensamientos, sentimientos, experiencias propias son más importantes que las de los demás; o sea, sentirse el centro del universo, sentir que uno es el más vergas y los demás son pendejos; en cambio, la autoestima es más la aceptación de uno mismo, de ser consciente de las virtudes y defectos, de las limitaciones propias.


Tener amor propio positivo es saludable porque permite que el ser se desenvuelva, sin obstáculos, en el mundo, de convivir con otras personas, de tener un mejor desempeño laboral y un compromiso con alcanzar las metas propias fijadas; por el contrario, tener poco amor propio, provoca el desarrollo de pensamientos negativos, indolencia, descalificación,  pesimismo, etc.


El entorno familiar es un factor determinante para el desarrollo del amor propio así que si tus papás te decían que eras un pendejo bueno para nada, que lo único que sabes hacer son pendejadas y además les valía madre lo que hacías, seguro que eres una persona con escaso amor propio y como consecuencia estás más expuesto a los abusos, no sabes defenderte y no estás seguro que tengas derecho a hacerlo, o sea, eres un pinche dejado; no le echas ganas al trabajo, te distraes con cualquier pendejada y es probable que le temas al triunfo. Es seguro que, ahora que ya eres adulto, tiendes a enfatizar estos hábitos que, lejos de ayudarte, te perjudican.

Descalificarte
Cuando hablas mal de ti mismo, o sea, decir que eres pendejo, un bueno para nada, un pobre diablo y no, no es que seas humilde, ni una forma de reconocer tus errores, simplemente, es autosugestión.


Otorgar crédito absoluto a lo que los demás dicen
Es cuando sientes que las cosas que dicen otras personas “tienen más autoridad”, “son lumbreras” o que parece que entienden mejor y ya, te quedas con eso, aceptado lo que otro pendejo dijo y no te detienes a checar si lo que dijo o hizo es correcto o es una mamada, simplemente, aceptas que sean ellos los que digan o hagan.


Victimizarte
Esto pasa cuando tienes pedos y lo primero que haces es sentir lástima de ti mismo y resignarte a las situaciones negativas sin siquiera hacer algo al respecto, o sea, te la “dejan Irineo” y ni pío dices. Es más, ni cuenta te das que tienes los medios para enfrentar esos pedos, pero prefieres la derrota sin pelear en vez de buscar soluciones.


Exigirte más de la cuenta
Cuando no tienes amor propio idealizas tu vida pero te cuesta un huevo fijarte pequeños objetivos, siempre te exiges más de lo que puedes hacer y en cambio minimizas tus logros porque pues quieres alcanzar más, lo que lleva a que siempre estés en deuda contigo mismo, o sea, no valoras los pequeños pasos que estás dando para alcanzar tu meta y por ende no disfrutas esas pequeñas glorias porque, como dice el primer punto, crees que vales verga.
Así que, amigo lector, quiérete más, acéptate cómo eres porque solo así serás feliz, feliz, feliz.


Hasta aquí mi post, digo, sé que es un tema extenso pero no soy psicólogo y mucho menos cuento con la información suficiente para detallar más el texto, tampoco quiero hacer C&P. Podría escribir más cosas empleando términos científicos, frases así rimbombantes para que “se note que sé” pero no, no quiero mentirles con información falsa o dudosa. Si quieren saber más sobre el tema pues está el Google, fuente de información (y código) de muchos.


Sí, el post es garra, es una pendejada, una mierda y demás adjetivos ojetes que quieras añadir. Como he venido diciendo: Si no te gusta pícale a esta liga


Ahí le pueden sugerir a Brion que ya no quieren más post míos, que ustedes traen mejor material porque tienen mucho amor propio y bueno, si nada más vienes a descalificar mis aportes nada más por diversión, por seguir un mame o porque me consideras muy pendejo (que es verdad) pues ¿Qué te digo?

Enviado desde mi iphone en el ciber que cuido que está en la colonia Jardín Balbuena. 

Grimaldo