4.13.2016

Asustando al chamaco

Uno cuando esta pequeño es susceptible a creer todo lo que un adulto le cuenta o dice. A veces nuestros mismos padres con el afán de que hiciéramos algo que no nos agradaba o no queríamos hacer, sutilmente nos recordaban que el "coco" nos llevaría si no obedecíamos.


Pero ese personaje ficticio no es el único, nuestras tradiciones mexicanas tienen mucho mas que ese ente para asustarnos o para obligar al menor a hacer algo.

Aquí abajo les pondremos algunos ejemplos de ello, así que léanlo, y pónganle corazoncito sino el robachicos vendrá por ustedes !!!!

1. El coco

Este sujeto parecía basar su existencia en impedir que te metieras en lugares donde no debías. Acordarte de él significaba enredarte como tamal entre tus sábanas porque no querías que ninguna parte de tu cuerpo -sobre todo los pies- quedara a su merced. A pesar de lo famoso que es el coco, aún nos preguntamos qué demonios se supone que es, ¿en verdad tiene forma de coco?, ¿le dicen así porque está pelón? Probablemente nunca conoceremos la respuesta.

2. El señor de la basura

Típica amenaza de tu mamá cuando tenías un tiradero en tu cuarto: “Si no recoges tus juguetes se los voy a regalar al señor de la basura”El miedo se apoderaba de ti cuando te dabas cuenta que -por flojo- habías puesto en riesgo tu preciada colección de Hot Wheels o Barbies que tanto tiempo y trabajo de persuasión te había costado conseguir. ¡Era la peor sensación del mundo! Al final, esta sádica técnica siempre daba resultados. ¡Gracias a nuestras mamás maniáticas por hacernos limpios y ordenados!

3. Chabelo

¿Te imaginas la sensación de que te catafixiaran una patineta o un Nintendo por una sala comedor? Debe ser uno de los eventos más traumáticos que puede vivir un niño.

4. El ropavejero

De niño no entiendes bien la función del ropavejero y los papás lo aprovechan a la perfección: ¡Es el señor que se lleva a los niños que se portan mal! Aunque este papel lo comparte con miles de otros servidores públicos, incluyendo al propio señor de la basura, el ropavejero parece ser el hombre del costal en carne propia. Y ni de borma querrías pasar por la experiencia de que un señor viejo y extraño te jalara para llevarte a quién sabe dónde para comerte o beber tu sangre o hacer quién sabe qué barbaridades.

5. La Llorona

Cuando la leyenda estaba fresca en tu cabeza, cada vez que ibas por la carretera y pasabas cerca de un río a la mitad de la noche, hacías lo imposible por hacerte el dormido… no fuera a ser que la vieras por ahí. Este enemigo podía cobrar una fuerza monumental si tenías hermanos mayores que te dieran santo y seña de dónde, cuándo y cómo se aparecía la Llorona.

6. El doctor y la enfermera

¡Un verdadero dúo del terror! Ni la paletita al final de la consulta era suficiente premio para contrarrestar la ansiedad de los quince minutos anteriores, cuando sólo esperabas que la enfermera apareciera con una aguja gigante que terminaría en tu bracito o en tu pompi. ¡Ouch!

7. El robachicos

Un personaje mucho menos sobrenatural que el ropavejero, pero igualmente escalofriante. El robachicos siempre estaba en busca de niños que no querían tomar de la mano a sus papás en la calle. El personaje perfecto para sabotear tubúsqueda de libertad en espacios públicos.

8. La Calaca

Durante la época de Día de Muertos era normal que entre tanto verso y poema te pusieras a pensar si por chistoso, pedorro o enojón, la calaca tilica y flaca no te acabaría llevando a ti o a alguno de tus conocidos. Las calaveritas pueden no ser tan chistosas cuando uno tiene ocho años.

9. Las momias de Guanajuato

Típico, te ibas de excursión a Guanajuato y no podía faltar la visita al Museo de las Momias. Si los cientos de cuerpos resecos exhibidos en vitrinas no eran lo suficientemente tétricos como para alimentar tus miedos, siempre podías leer las historias de vida de cada uno de estos personajes y las leyendas que los rodeaban. ¿Quién en su sano juicio cree que es buena idea llevar niños pequeños a este lugar

Y a ustedes, conque los asustaban?

-Brion