10.03.2016

Lunes Godinez - Evita que tus empleados vivan en la oficina


Escuchamos en todas partes lo importante que es encontrar un balance entre nuestra vida privada y profesional. Sin embargo, en México el trabajo en exceso está sobrevalorado: se tiene la percepción generalizada de que las personas que se quedan horas extra en la oficina son más trabajadoras y están más comprometidas con su empresa.
¿Cuántos empleados se quedan tarde con tal de quedar bien con sus jefes? ¿Cuántos jefes tienen la mala costumbre de pedir cosas a último minuto –aunque éstas  puedan esperar al día siguiente–? ¿Cuántos jefes consideran que irse tarde muestra “solidaridad” con ellos y el resto del equipo?

Trabajar más no es trabajar mejor

Permanecer más horas en la oficina no significa ser más productivo. Una investigación realizada por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) y publicada en The Economist reveló que, cuanto más trabajan las personas, más disminuye su productividad. Esto se ve claramente reflejado en los países con las economías más desarrolladas, como Alemania y Holanda, en donde las jornadas laborales son más cortas. 

A decir verdad, salir tarde de la oficina genera muchas más desventajas que ventajas: quizá se logre terminar los pendientes del día, pero los empleados se sienten frustrados, cansados y desmotivados… y esto repercute notablemente en la calidad de su trabajo.

Diversas iniciativas promueven el hecho de que los empleados cumplan sus horarios laborales. Una de ellas, la que ha tenido mayor eco, es Go Home on Time Day (Día para irse a casa a tiempo); nació en 2000 en el Reino Unido, y desde entonces se celebra cada 24 de septiembre en países como Reino Unido, Australia o Canadá.

Cómo promover que tus empleados se vayan a tiempo

Ya tienes bien claro que salir a tiempo de la oficina no es un lujo, sino un derecho, y que tus empleados trabajen horas de más no es beneficioso ni para ti ni para tu empresa. ¿Cómo asegurar que todos terminen su trabajo en tiempo y forma?
Claro que esto dependerá en gran medida de tus empleados, de su capacidad para organizarse y evitar las distracciones. Sin embargo, tú puedes hacer mucho por apoyar este punto.

Aprende a administrar tu tiempo
Como líder de un negocio, tienes la gran responsabilidad de poner el ejemplo. Sé organizado con tus tareas y evita distraerte; haz tu máximo esfuerzo por terminar de trabajar a la hora establecida. Recuerda que de tu aprobación depende el trabajo de los demás; si no eres administrado, lo más probable es que retrases el trabajo de todos.

Establece un enfoque en resultados
Deja claro a tus empleados que lo importante es entregar resultados óptimos, y no demostrar que les encanta estar en la oficina. Incluso, si terminan una tarea o proyecto antes de que se termine su horario de trabajo, concédeles el gusto de irse a casa. Asimismo, asegúrate de que los procesos para alcanzar las metas sean claros y estén libres de pasos burocráticos que sólo quitan tiempo.

Escúchalos
Realiza entre tus trabajadores un sondeo para conocer las causas principales por las que se quedan tarde en la oficina. Eso te permitirá, a ti o a tu equipo de Recursos Humanos, atacar el problema de raíz.
Ofrece asesoría
Considera que se impartan talleres de administración del tiempo entre tus empleados. Será una excelente inversión para incrementar su productividad y fomentar un horario de trabajo saludable.
Sé congruente
No premies ni elogies a los empleados que se quedan más tiempo a trabajar. Hacerlo es equivalente a decir que eso es lo que realmente valoras de un trabajador.
Fomenta el tiempo en familia
Ofrece a tus empleados beneficios corporativos para disfrutar en familia: entradas a parques de diversiones, descuentos en restaurantes y hoteles, etc.
Reduce el número de juntas
Las juntas retrasan las tareas diarias, y son en muchos casos prescindibles.  Realiza reuinones sólo cuando sean estrictamente necesarias. En muchos casos, las juntas pueden sustituirse por algunas herramientas diseñadas para trabajar en equipo, como Evernote o MindMeister. Y, por favor: ¡evita convocar juntas a última hora!
No mandes mails fuera del horario de trabajo
Aunque no pretendas que te respondan en ese momento, aguántate las ganas de mandarle a tus empleados correos a la 1 de la madrugada, pues podrías enviarles el mensaje equivocado. Pueden esperar al día siguiente.
Evita que se lleven trabajo a casa
De nada sirve pedirles que se vayan a casa si deben trabajar ahí. Si llega la hora de irse y aún queda mucho trabajo por hacer, proponles una solución.

Fuente :  Entrepreneur

-Brion