¡Qué tal, mis queridos lectores!
El jueves camino a casa pasé
frente a una parejita coqueta que iba de la mano caminando con toda la
tranquilidad del mundo. Fue de esas veces que te pones a divagar de los comos y
los porques de la nada y de todo. Me acordé de una situación curiosa con un
noviecito que tuve hace ya muchos años. Recordé que veníamos de regreso de la
tienda y veníamos tomados de la mano, otros amigos venían con nosotros y alguno mencionó que venía la hermana de mi
galán en nuestra dirección. En ese momento solté su mano como por acto reflejo,
si me preguntan hasta el momento no podría decir porque fue. No es como si no
supieran que fuera mi novio ni como que hubiera algo que esconder. Simplemente
sentí el impulso de soltarlo.
Y es que si me conocieran sabrían
que las demostraciones de afecto no son como que mi fuerte, con confianza puedo
llegar a ser hasta encimosa pero de otra forma, incluso un saludo de beso se me
hace forzado.
Entonces vamos al tema, las
demostraciones públicas de afecto. He visto parejas darse arrumacos subidos de
tono a mitad de una plaza comercial como si no hubiera nadie más a su
alrededor. Debe ser bonito, ¿no? Olvidarte de que existen otras personas en el
mundo y enfocarte solo en quien tienes frente a ti.
Ahora bien, ¿Qué tanto es
tantito? ¿Cómo saber que tanto está bien y que tanto ya es incomodo para quien
va pasando? ¿Qué tanta relevancia tiene
el ser o no ser moderado en cuanto a demostrarle a tu pareja cuanto te gusta,
cuando hay otras personas presentes?
Partamos del punto de que, como
generalidad y a sabiendas de sus excepciones, las mujeres son más dadas a las
demostraciones públicas de afecto. Entonces, ¿Qué opinan los hombres al
respecto? En una pequeña encuesta con cinco distintos especímenes del género, llegué
a la conclusión de que no las odian del todo, sin embargo señalan que no deben
ser excesivas ni fuera de lugar. ¿Qué es eso de querer estar sentada en sus
piernas si están en una reunión familiar? También opinan que es importante no
caer en lo vulgar ya que, si bien es cierto disfrutan demasiado nuestras
grandes demostraciones de afecto, también es cierto que es incómodo cuando las
hacen frente a sus amigos. Chicas, piensen que una reacción positiva en el caso
de los chicos puede ser difícil de disimular. Igualmente es de mencionar que no
está padre que esperes que cada dos minutos te esté recordando lo mucho que te
ama y cómo es que no puede vivir sin ti.
Y bueno, ¿las mujeres que opinan
al respecto? En otra pequeña mini encuesta encontré lo que me resultaba
imposible de creer: ¡las mujeres son menos afectas a esto! Pero bueno, vamos a
sus porques antes de creer que el mundo está loco. De las cinco encuestadas dos estuvieron de
acuerdo con demostraciones públicas moderadas, sin caer en los toqueteos
inoportunos. Tres más opinaron que es difícil conseguir que los hombres
realicen muestras públicas de afecto, sin que sea para demostrar que "la
chica es suya" (nada nice que te abracen colocando su mano en tu trasero
cuando llega otro macho alfa, muchachos). En ese punto tengo sentimientos
encontrados ya que, si bien si me ha tocado ese tipo de situaciones incómodas,
no creo que sea del todo cierto. Creo yo que las demostraciones públicas de
afecto por parte de los chicos se dan cuando se sienten enteramente cómodos con
sus parejas.
Buenos pues, ahí está mi
investigación de campo de este fin de semana. ¿Cuál es su opinión en cuanto al
tema? ¿Están a favor o en contra? ¿Creen ustedes que esas demostraciones si son
realmente por marcar territorio y no propiamente x afecto?
Sea como sea, dejen sus
corazoncitos y denle click a la publicidad, acabo de ver un trajesito que se le
vería chulísimo a Bebexho y no se va a pagar solito. Igual visiten la
EmBrionteca y dejen sus sugerencias de libros para ver qué es lo que podemos
hacer al respecto. Tengan una bonita semana y sean felices, solo por el hecho de
estar vivos :)
-Sabina